Cuando se pierde a un hijo...
Y no hay palabras para consolar el dolor de una madre, pero si
para superar la perdida..
Así que pensé en
escribir algo para aquellas madres que han sufrido esta pérdida tan dura, que
muchas veces abate el alma. Los
abrazos y los besos las buenas palabras
de ánimo ayudan pero el dolor sigue…
Así que :
No hace
falta decir nada. Abraza a la persona que ha tenido la pérdida. Llora con ella.
Déjala que hable de su pérdida. No intentes cambiar de tema. No creas que si
pronuncias su nombre se lo recordarás, porque ese padre o madre no necesita que
le recuerden a su hijo, lo llevan en la cabeza las 24 horas del día. No
le metas prisas en su recuperación. Cada uno tiene su “tiempo”. No dejes pasar
tiempo para ir a verles cuando tú creas que ya tienen menos dolor. No te
olvides de ellos..
Me miro con su sonrisa picarona que le
caracterizaba, acaricie su mejilla diciéndole que todo estaría bien, pero por
dentro tenia tanto miedo y tal vez mas que el. Me levante del sillón abriendo
las cortinas el sol entraba y una brisa me inundaba, el me miraba fijamente
mire en sus ojos con poco brillo tristeza, cansancio, dolor, lo amaba, y sentía
que no podía hacer nada contra todo lo que le pasaba mis intentos los sentía inútiles,
pero tenía en mente que todo lo haría por él. Me dijo con voz delicada y dulce:
Mama, me duele toda la espalada. Su piel
estaba pálida, sus mejillas perdían color, sus ojos perdían vida, sentía que lo
perdía, corrí por los pasillos desesperada, y en un momento a otro, la sala
estaba llena de gente de blanco, moviéndose de un lado para el otro, todos
apresurados, y yo sin poder retener lagrimar de horror! Que pasaba? Que sucedía?
Que era esto? No entendía, y el único pensamiento que permanecía en mi mente
era : Porque a el ? Porque no a mi? Porque..? Porque…??.. Me llevaron de los
brazos, y en un segundo sentía que mi
vida terminaba, me desplome perdiendo todo el equilibrio de mi cuerpo, solo
pensaba en mi niño, en mi única razón de vida. Me aterraba perderlo, eran 4
años de vida con el, los mejores de mi existir, recordaba sus travesuras, sus carcajadas,
sus dibujos que pegaba por toda la cocina, sus besos cada noche, sus abrazos de
osito como el decía, su manitos delicadas con las que me masajeaba los hombros,
y me acariciaba el pelo, no podría vivir
sin el, el era mi mundo, mi vida era parte de mí, no sabría vivir sin el. Cerré
los y lo imagine como era antes, con el pelo lacio, sus mejillas regordetas
sonrosadas, su mirada picara, su sonrisa iluminante. Abrí los ojos
inmediatamente sabiendo que el ya no estaba, lo había perdido, se había ido de
mi vida, mi corazón se aceleraba, sentí como mi respiración se agotaba, ahora
lo entendía el ya no estaría conmigo físicamente
pero lo tendría siempre en mente, lo recordaría con un amor inigualable, el existirá
en mi ser interior, había aprendido amar intensamente a otro ser que no era yo.
El era parte mía, llore desconsoladamente
nada sería igual y lo sabía muy bien, pero también sabía que todo en esta vida
pasa por algo, y ahora me sentía más fuerte decidida a todo, tenia tantas cosas por querer hacer, y hacerlas por el . Lo único que salieron de mis labios fue: TE AME
COMO A NADIE ANTES..!
Mas vale pensar en lo que has tenido,
que en lo que has perdido.. Tu hijo estará siempre contigo…
Quiero que sepas que donde estés, siempre estarás conmigo... Tu amor fue
el
primero para mí, la primera alegría, y también tu alma, la primera que por siempre conoceré. Tú me has dado el valor y el ánimo para continuar mi viaje. Espero poder hacer lo mismo por ti. El latido de tu corazón siempre me llamara hacia a ti.
primero para mí, la primera alegría, y también tu alma, la primera que por siempre conoceré. Tú me has dado el valor y el ánimo para continuar mi viaje. Espero poder hacer lo mismo por ti. El latido de tu corazón siempre me llamara hacia a ti.
Comentarios
Publicar un comentario